Es un puente que esta construido en un pequeño pueblo de Escocia,
sin embargo, a partir de la década de los 60’ del siglo pasado, el puente comenzó a ganar notoriedad por otro motivo. Los perros que pasaban por los últimos dos parapetos del lado derecho del puente se detenían en seco y, a continuación, saltaban inexplicablemente por sobre las barandas hacia el vacío. Los perros por supuesto, después de caer desde lo alto terminaban estampados contra las rocas o el mismo río, quedando malheridos o muriendo al instante. Lo increíble es que algunos perros que sobrevivían a la caída, amortiguada a veces por el agua del mismo río, subían nuevamente a lo alto del puente para volver a saltar.
Una familia paseaba a su perro Ben cuando se les ocurrió cruzar por el puente Overtoun. Los dueños de Ben aseguraron que éste se detuvo un momento y se encaramó sobre el parapeto de piedra del puente, arrojándose a continuación al vacío. El animal terminó con la mandíbula fracturada y una pata quebrada, por lo que debió ser sacrificado este es una de ciento de historias, por eso se le conoce como el puente de los perros suicidas.
retirate ya
ResponderEliminarretirate ya
ResponderEliminar